Es como dos animales que juntan sus cabezas para pelear y conseguir marcar el dominio (dos gallos en pelea o dos toros en su primer encuentro de primavera o dos carneros en presencia del rebaño), o también dos personas que acercan su boca mostándose mútuo amor. Es la lengua y la mano, el fuego y el arma, la noche y el alba, el sol y su ocaso de donde nace la noche nostálgica, es el deseo cumplido entre senderos estrechos y espacios borrachos de luz, es la legitimidad de la libertad de expresión. "Como dios manda"
3 comentarios:
bueno, muy bueno....buena imagen...
Es como dos animales que juntan sus cabezas para pelear y conseguir marcar el dominio (dos gallos en pelea o dos toros en su primer encuentro de primavera o dos carneros en presencia del rebaño), o también dos personas que acercan su boca mostándose mútuo amor. Es la lengua y la mano, el fuego y el arma, la noche y el alba, el sol y su ocaso de donde nace la noche nostálgica, es el deseo cumplido entre senderos estrechos y espacios borrachos de luz, es la legitimidad de la libertad de expresión. "Como dios manda"
Sí. Y también pueden semejar dos grandes nubarrones que al chocar desencadenan una gran tormenta. ¿O no?
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